Clases particulares, ¿son necesarias?
Actualmente parece que los padres optan por apuntar a
sus hijos a clases extraescolares cuando estos tienen problemas con ciertas asignaturas,
o solamente para que tengan un refuerzo extra para hacer los deberes o por si
acaso les puede ir mal en la escuela.
Yo he trabajado de profesor particular, el perfil
suele ser un chico o una chica entre 16 y 25 años, estudiante. Ese perfil hace
que los padres se sientan seguros de que sus hijos están con alguien que no es
profesional, pero conoce el ámbito educativo en el que se rodea el niño y sabe
como mejor aconsejar o enseñarle. El precio de media ronda los 10 euros la
hora, y los niños suelen tener una media de 2 o 3 clases particulares a la
semana, que puede ser incluso más si se acerca un examen o hay un contenido
suspenso.
Este gasto por parte de las familias, en mi mas franca
opinión, me parece una exageración, en ocasiones es necesaria la atención de
otro tipo de estimulo académico como es el del profesor particular, si no
consigues entender a tu profesor del colegio o a tus padres, ya que te puede
dar más perspectivas a la hora de trabajar, sin embargo, este trabajo sigue
siendo de los docentes de los colegios y sus padres, por lo que los padres no
tendrían que estar preocupándose de buscar profesores particulares en el caso
de que sus hijos vayan bien en su escuela, y en el caso de que les vaya mal,
hay que localizar el por qué y tratar de corregirlo, y cuando no se pueda
producir la ayuda paterna extraescolar, y se haya dado la atención al alumno
con problemas en el colegio, entonces la atención de un profesor particular
puede ser de ayuda, pero creo que el exceso de esta actividad puede ser incorrecta
y una medida muy cara. Los valores y la constancia primero se tienen que
enseñar adecuadamente en casa y en la escuela.
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