La presencia de los videojuegos en mi educación.

La presencia de los videojuegos en mi educación.

¿Son los videojuegos algo negativo o una herramienta para la educación?

Este tema es de gran controversia, puesto que muchos piensan que los videojuegos despiertan las facetas más agresivas y negativas de los niños, y muchos piensan que despierta la creatividad y motivación por el aprendizaje jugando.

En mi opinión se podría decir que ambos tienen razón, a continuación explicaré brevemente la presencia de videojuegos en mi vida educativa.

Desde que era un niño, tenía una video consola, ya sea la game boy color, nintendo 64, o la psp o play station 2. Mis padres tenían la norma de no poder jugar hasta terminar las tareas del colegio como los deberes, o las tareas de la casa como barrer o limpiar la habitación. Cuando esto pasaba, me tiraba horas jugando con mi hermano mayor a cualquier juego. Esto despertaba en mí una motivación por querer jugar a mi juego favorito de tal manera, que dibujaba personajes, me intentaba disfrazar de ellos, o hacia movimientos especiales como ellos (Jin Kazama en Tekken 3).

Yo no creo que esto sea nada negativo, solo era despertar pasión en un chavalín, y no creo que afectase negativamente a mis estudios.

Una vez empecé la secundaria, recuerdo que mis padres tenían menor control sobre mí, casi repito curso por estar todo el día jugando al Monster Hunter Freedom de la PSP, ese año me quedaron muchas asignaturas, y hasta que no dejé de jugar no conseguí aprobar el curso. Por otro lado, la mayoría de juegos que he jugado eran en inglés, y en muchas ocasiones conocía gran parte del vocabulario de la asignatura de inglés por utilizar mas este idioma al leer los textos  de los videojuegos y traducirlos.

En mi opinión, abusar de los videojuegos conlleva a un futuro fracaso escolar, antes o después dejas de darle la importancia que requiere para dársela a la maquinita, pero por otra parte, sin abusar de ellos se pueden usar de forma recreativa para divertirse y pasar el rato y quitarte el estrés que produce el colegio.